Si bien el mentoring es una herramienta que cada día es más usada en las organizaciones, en procesos individuales y está siendo visto como un factor clave para potencializar el desarrollo de los empleados, pienso que la conceptualización que se tiene dista mucho de lo que este proceso abarca en la realidad. El simple hecho de acotarlo, la mayor parte de las veces, a que es una relación en la que hay una persona que tiene más experiencia que la otra, me lleva a ver este lado trunco con el que se trabaja el mentoring de forma general, despertando en mí el deseo de socializar de forma correcta no solo la razón de ser del mismo, sino las bondades y beneficios para la persona y para la organización de los diversos tipos de mentoring que existen, puntualizando en el mentoring de desarrollo, que de forma sutil lleva a una transformación de pensamiento y a la incorporación de nuevos conceptos a la vida del mentee, es decir, a crear una nueva forma de estructurar la realidad.
La importancia del mentoring de desarrollo la fundamento en que es un camino que lleva al ser humano a los diferentes espacios de sí mismo, a esa parte escondida que está colmada de poder y energía, y que desea ser explorada y manifestada. El camino que se recorre con el mentoring de desarrollo lleva a la persona a hacer contacto con esas capas escondidas y a manejarlas de forma tal que le permite darse cuenta de su propio potencial e incorporar nuevas maneras de conceptualizar las cosas y, por ende, de manifestarlas.
Los seres humanos nos desenvolvemos en el día a día con una capacidad adormecida para crear y transformar nuestra vida, como si nuestro ser interior dormido sumara nuestros pensamientos, creencias e incluso nuestras intenciones para actuar de forma automática, y es ahí en donde el mentoring de desarrollo nos lleva por el camino para liberarnos de conceptos preestablecidos y restaurarlos hacia un estado de armonía y de expansión con nosotros mismos y nuestro entorno. Nuestra dinámica diaria de vivir diversos roles, el de papá, mamá, empleado, amigo, vecino, entre otros, así como la necesidad de relacionarnos con los demás, nos llevan por momentos a caminar por la vida con nuestras máscaras como si no creyéramos que ser genuinamente nosotros sea algo en sí aceptable.
Haciendo una analogía, podríamos equiparar el mentoring de desarrollo al momento en que cerramos los ojos para percibirnos con esa mirada interior en la que nos habitamos en plenitud, potencializando nuestro aprendizaje acompañados de alguien más. Buscando en primera instancia atravesar el propio reflejo navegando por la introspección, y alcanzar así nuestros mundos interiores en pos de nuevas posibilidades. Esta es tan solo una invitación para ti, para que a través del mentoring explores tu capacidad de crear, de expandir y de transformar. Una invitación a que reconozcas esa posibilidad infinita que existe dentro de ti para co-crearte y con ello co-crear un mundo mejor.